viernes, 13 de noviembre de 2009

Minirrelato: Sayonara Kanashii Lover






Ella:

Me encanta mi nueva vida, al final logré encontrar la paz y tranquilidad que necesitaba; he logrado poner en orden mis ideas (algo bueno que tiene mi nuevo trabajo en el cual me encargo de preservar el medio ambiente) y con una gran serenidad he podido seguir adelante. Lo único que me atormenta es tu recuerdo... A cada lugar que voy algo me evoca tu presencia, tu nombre escrito en un cartel, una propaganda que promociona una tienda que justo está enfrente de tu casa, conozco a gente que sabe de ti y de tu familia, sueño contigo e incluso a veces siento que me pasas el brazo por los hombros como cuando estábamos juntos. En verdad fue algo muy bello la historia que vivimos pero también fui herida en lo más profundo. Tu frialdad congeló nuestra relación, tu indiferencia ninguneó nuestra relación, tus prioridades aplastaron nuestra relación... Hasta un punto que llegaron a sucederse las cosas y por misterios de la vida, ésta nos separó. Al final con el tiempo creo que esto es lo mejor que nos pudo haber pasado aunque creo que por mi parte fue a un precio muy alto.

Solo deseo poder seguir con mi vida y dejarte atrás como un simple recuerdo. Por favor, no me busques más, no uses medios rastreros como la brujería o el vudú; de sobra sabes que no me dejaré encontrar. El hecho de que hayas sido lo más querido por mi en mi vida no quita que debo aceptar las circunstancias y seguir en esta nueva etapa hasta que me sea posible. Por lo tanto, trata de pasar hoja, será lo mejor para ti. No vuelvas a venir a mi casa, tienes que rehacer tu vida.

Adiós; a quien fue una vez el amor de mi vida.

Ellen


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Él:

No puedo soportarlo más. ¡Esta soledad me está engulliendo vivo! Por mucho en que se empeñen en que trate de olvidarlo soy incapaz de poder seguir adelante con mi vida, el sentido de ésta me lo dio tu sonrisa, tu cálida y resplandeciente sonrisa, ahora apagada desde hace más de tres años. Las noches son frías, los veranos infernales y en primavera y en otoño mi consciencia se desdibuja en el sopor de los recuerdos vividos contigo.

Siempre he sabido que la expresión de mis sentimientos nunca ha sido mi fuerte pero eso no quiere decir que te quisiera menos, en ningún momento había dejado de amarte y siempre con la misma intensidad del primer día. Eras el motor que me empujaba todos los días para poder cambiar el mundo con mis propias manos, mi aliada en los momentos de flaqueza y mi cómplice en las situaciones de júbilo y alegría. Sé que en los últimos meses en los que estuvimos juntos fui muy desconsiderado contigo, y no fue a propósito. Te estaba reservando innumerables sorpresas para nuestro soñado futuro en común. En el aciago día de la catástrofe te dirigía a la casa que había estado construyendo por tanto tiempo en secreto, y cuando hubiéramos estado allí, tenía todo preparado para pedirte la mano en matrimonio. Maldito día en el que decidí llevarte conmigo allí, mil veces maldito el coche que iba en sentido contrario y nos truncó nuestro futuro para siempre y maldito sea tu instinto de protección que me salvó de una muerte segura.

Oh Ellen, necesito tus palabras de ánimo y consuelo pero rehúsas el contactar conmigo. Gracias a una médium voy progresando y siento que voy acercándome más a ti porque quiero volver a hablar contigo, necesito contarte tantas cosas que te quedaste sin saber y sobre todo lo que más me dolió fue que nos despidiéramos discutiendo, era parte de mi plan: el hacerte enfadar para que así te pillara aún más por sorpresa. Quién habría imaginado que por una jugarreta del destino se iban a quedar las cosas así.

Realmente me siento en paz cuando voy a ver tu tumba y te la cubro de flores, siento tu presencia en el viento que me susurra y desordena el pelo con suavidad y tumbado encima de la lápida comienzo a hablar de todo lo que me pasa entre sollozos y lágrimas. Es irónico que ahora sea cuando precisamente me cueste tan poco expresarme, cuando no me puedes oír...

Espero que esto que se llama vida; que me desgarra minuto a minuto, segundo a segundo pase con rapidez y así reunirme contigo de nuevo y para siempre. No me basta el consevar tu recuerdo solo por unas fotografías, unas horas en las que esté soñando contigo, el olor de un perfume o tu voz en un mensaje del contestador. Necesito a mi Ellen en carne y hueso. Por favor, espérame solo un poco más. No tardaré mucho. Bendita mortalidad humana.

Hasta ahora mi vida, enseguida voy en tu búsqueda.

Jake



XXX
M♥

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